15 julio, 2010

miedo...

He sido victima de mobbing o acoso laboral durante cerca de dos años.
Me gustaba tanto mí trabajo que por no perderlo, acabé perdiendo mi autoestima, mi dignidad.
Lo último que hice fué firmar una excedencia voluntaria por seis meses... que es lo mismo que un despido... pasé un horrible día en el que me negaron mi derecho de ir a urgencias para que me calmaran la ansiedad, me arrinconaron y me apartaron diciendome que no salía de allí hasta que viniese mi coordinadora.
Mi coordinadora no me llevó a urgencias... me llevó ante la jefa que me dijo que o firmaba un despido voluntario o me lo firmaban ellos.
Después de estar unas cuatro horas llorando, se está tan aturdida que ni piensas, solo quieres dejar de llorar... la palabra "excedencia" pasó por mi cabeza y la solicité.
Después de una conversación de la que solo recuerdas "despido" "despido" "despido" firmas cualquier cosa, y firmé una excedencia.

1 comentario:

  1. Alicia Martínez Díaz11 de noviembre de 2012, 13:11

    Querida desconocida: En primer lugar felicitarte por haber tenido valor y ganas de publicar lo sucedido. Yo estaba pensando en abrir un blog también relacionado con este tema. Me pasa casi parecido a lo que te pasó a tí. Ahora y hasta el 29 de noviembre de 2012, tengo un período de alegaciones para "justificarme" una vez más pero creo que no lo voy a hacer y directamente creo, según la abogada, iremos a un contencioso-admvo. ya que, trabajo para la Admón. Balear, concretamente en la Conselleria d'Educació. Realmente es increible como gentuza de este estilo se atreven a insultar a los que no entran en su circulito ridículo de hipocresía pareciéndose ellos/as mismos/as a una jauría de hienas rampantes, muertos de hambre psicológica, mediocres de tres al cuarto sin creatividad ni iniciativa ninguna. Pero, a mi modo de verlo, desde mi problema, la culpa de todo la tiene el responsable de la sección, del grupo o de la oficina o centro de donde se trabaja. Por que lo que no puede ser es que un grupúsculo de subnormales arremeta contra el raciocinio y la honestidad en el trabajo. Repito. La culpa la tiene el responsable directo del personal.

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